El corazón, núcleo regulador de la vida del hombre, es el centro de todo deterioro en él, y no porque el corazón sea malo, esté enfermo o produzca las enfermedades clínicas, sino porque desde este lugar programamos cada una de las acciones de nuestras vidas.
El corazón tiene en su existencia vital
la LUZ de la VIDA. Mientras ejecuta los movimientos de diástole y sístole emite
vibraciones-impulsos, que remarcan la memoria original de Creación, ya que el corazón
del hombre no es una máquina o un órgano equivalente a un pedazo de carne, sino que constituye
EL CENTRO DE LUZ,
receptáculo de vibración en sí, de la VIDA, que replica a cada instante el
origen de las Leyes que lo originaron
Todo impulso del corazón va grabando
las acciones del hombre en cada célula, por tal una vida desordenada, un espíritu perturbado, una mente
corroída por el sufrimiento, la ira, la venganza, las filosofías mal dirigidas y una carencia de una motivación
real para vivir, degeneran una a una las células de nuestro cuerpo generando enfermedades y pesares de todo tipo.
Es importante comprender que las principales causas de las enfermedades que sufrimos, radican en nuestro estilo de vida: en la “alimentación” inadecuada, mala y excesiva, en el abuso de medicamentos químicos e insecticidas en el campo, en los malos hábitos de vida, en la vida sexual sin control, en el egoísmo, en el estrés por situaciones socioeconómicas y familiares, en la destrucción del medio ambiente, entre otras.
Por tal el ser humano sensato e inteligente,
que desea sanar su cuerpo, comenzará primero por su corazón para
que la mente programe su Vida hacia la Luz y la sanación física y espiritual
que ello trae; pues si el modo de vida sigue igual, la enfermedad también se complica, a pesar de cualquier tratamiento.
Hay que cambiar los hábitos y el modo de vida, para lo cual es necesario conocer nuestra verdadera esencia y poder interior, por encima de ideologías o creencias que no permiten la conexión del hombre con la fuente de la vida, aquella que establece una conexión permanente con los animales, las plantas y el universo, la conexión que tenemos con el TODO, porque de nada sirve querer cambiar las políticas, los sistemas o los problemas externos si primero no cambiamos nosotros.
Hay que cambiar los hábitos y el modo de vida, para lo cual es necesario conocer nuestra verdadera esencia y poder interior, por encima de ideologías o creencias que no permiten la conexión del hombre con la fuente de la vida, aquella que establece una conexión permanente con los animales, las plantas y el universo, la conexión que tenemos con el TODO, porque de nada sirve querer cambiar las políticas, los sistemas o los problemas externos si primero no cambiamos nosotros.
Luego de la Conferencia, se iniciará el taller "El Código Luz del Corazón" , un proceso de preparación que contiene, unos mecanismos que descubren y desatan los secretos del corazón a aquellos que se propongan dar aplicación real y verdadera de este conocimiento en sus vidas diarias , mediante acciones sencillas y cotidianas con las que podemos hacer el “Cambio” del que tanto se habla, pero que parece tan difícil de conseguir.
Los invitamos para que asistan a esta conferencia que se viene realizando en diferentes ciudades y países de Latinoamérica dándose la oportunidad de conocer los misterios del corazón y erradicar de su ser los pesares y malestares físicos y espirituales.
¡Los esperamos!
